La selección española de fútbol fue agasajada este lunes en Madrid tras la conquista el día anterior de su cuarta Eurocopa, convirtiéndose así en la más laureada del continente pese a no entrar de salida entre las favoritas para adjudicarse el título en Alemania. En su triunfal camino, el combinado dirigido por Luis de la Fuente ganó los siete partidos disputados imponiéndose a selecciones del calibre de Croacia, Italia, Alemania, Francia o Inglaterra, su rival en la gran final.
El recibimiento a la selección fue verdaderamente apoteósico y varios cientos de miles de aficionados se dieron cita en las calles de las capital por las que transitó el autobús descapotable que desplazó a los internacionales en su recorrido institucional, que comenzó en el Palacio de la Zarzuela -donde fueron recibidos por SSMM los Reyes- continuó por el
de La Moncloa -con recepción dl presidente del Gobierno, Pedro Sánchez- y desembocó en la Plaza de Cibeles, donde se agolpaba una auténtica multitud.
Allí fueron recibidos por el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida y se desarrolló un acto cargado de pasión y emoción que en esta ocasión contó con Morata como maestro de ceremonias, un papel en el que quizá pocos le imaginaban pero que cumplió a la perfección siguiendo la estela de otros compañeros como Pepe reina o Jordi Alba.
El capitán de la selección no escatimó elogios desde el escenario para el resto de componentes de la ‘roja’. «Sabía que mis compañeros eran muy buenos. tenemos el mejor país del mundo y somos campeones de Europa», destacó el delantero antes de dar las gracias «a todos los compañeros que nos han ayudado y no han podido estar en Alemania, porque también es su trabajo».
Entre los más vitoreados durante la celebración estuvieron Rodri Hernández y Dani Carvajal, para los que se pidió con insistencia el Balón de Oro; Lamine Yamal y Nico Williams, que se han convertido en uno de los dúos de moda en el fútbol mundial tras su descollante actuación en la Eurocopa; o incluso Cucurella, otro de los grandes protagonistas tras completar un torneo impecable y que no tuvo reparo en interpretar la canción que le dedicaron en su día los aficionados del Chelsea.
También fue jaleado el seleccionador, Luis de la Fuente, que durante su alocución calificaba como «un orgullo poder dirigir al grupo de jugadores y personas que son estos futbolistas»,
quienes representan «una escuela de valores como los de superación, trabajos, generosidad o talento. Son un ejemplo para este país», por lo que instó «a seguir así de unidos, que es como somos más fuertes».
El acto tuvo también instantes de enorme emotividad, como cuando subió al escenario de la mano de Álex Baena la pequeña María Camaño, que sufre sarcoma de Ewing y que es fan incondicional de Álvaro Morata, que fue el encargado de contar su historia entre los aplausos del público.
La fiesta, como era de esperar se prolongó hasta el filo de la medianoche y otro de los momentos estelares fue la interpretación de la canción ‘La potra salvaje’, que se convirtió en el himno de la selección a lo largo de su periplo en esta Eurocopa, por parte de su autora, la cantante Isabel Aaiún. Y para terminar, la frase que figuraba rotulada en el autobús y que se ha convertido en un eslogan de cara al futuro ‘Its only the beginning’, es decir, ‘esto es solo el principio’.