La Comunidad de Madrid ha visto reducir el número de viviendas turísticas registradas en alrededor de 3.000 durante los últimos cinco años y actualmente tiene registradas más de 13.000, de las cuales una inmensa mayoría se ubica en la capital.
Así se ha señalado durante un encuentro informativo en el que ha participado el consejero de Cultura, Turismo y Deporte, Mariano de Paco Serrano, para hacer balance de su primer año de legislatura, en el que ha recordado el anuncio realizado en junio del incremento de efectivos para el control de estas viviendas, así como el endurecimiento de las sanciones, la mejora de la colaboración con los ayuntamientos y la reforma de la Ley de Ordenación Turística.
De Paco ha vuelto a apostar por la «regulación» y la «ordenación» de estas viviendas sobre la «prohibición», en «coherencia», ha señalado, con la doctrina de la Unión Europea. Asimismo, ha recordado que este sector, el de las viviendas de uso turístico, es «Legal» y «genera empleo, economía e industria».
Frente a esto, ha lamentado la apuesta del Gobierno de España, de manos de la ministra de Vivienda y Agenda Urbana, Isabel Rodríguez, por «prohibir e intervenir», pero «no legislar». En este sentido, se ha mostrado «sorprendido» por el «silencio» del ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, sobre esta cuestión.
En este primer año de Legislatura, la Comunidad de Madrid ha duplicado los efectivos encargados del control de las viviendas de uso turístico, con 13 nuevos –que se unen al actual equipo de 16– y a los que se añadirán otras cuatro personas para la recopilación e intercambio de datos.